Seguro que si habéis estado en Marruecos o habéis visto fotos, lo recordáis lleno, rebosante de color.
Es una de las cosas que más se te graban, junto con los olores de la comida, de las especias, de las flores... del sudor...
Por eso me ha llamado tanto la atención descubrir estas imágenes tan marroquíes y a la vez tan blancas, el resultado es sorprendente y el estilo que rebosan es espectacular.
Todo es sencillo pero muy cuidado, aunque claro, nada sería lo mismo sin contar con esos maravillosos suelos hidráulicos que ya sabéis que son mi pasión.
Ah, una cosa... tengo en casa dos de esas preciosas lámparas redondas perforadas, aunque compradas en Granada y en color marrón...
Si un dia me da el arrebato, a lo mejor las pinto de blanco!!!
Ah, una cosa... tengo en casa dos de esas preciosas lámparas redondas perforadas, aunque compradas en Granada y en color marrón...
Si un dia me da el arrebato, a lo mejor las pinto de blanco!!!