Y yo, que se me parte el alma viendo algo así, no la pude dejar donde estaba, no al menos sin llevarla al veterinario, darle de comer y tratar de buscarle un hogar.
Y así me pasé el dia, con la perra sin separarse de mí mientras recorría el pueblo hablando con todo el mundo a ver si alguien se quedaba con ella.
Al final hubo suerte y se la quedaron unas amigas inglesas a las que les encantan los perros y que tienen un negocio rural con alojamientos, jardín, finca con caballos, estanque... y más perros.
No podría ser mejor, me fui de allí con una sonrisa en la boca y una lagrimilla asomando, feliz de haberla visto comer, correr y jugar con otra perra y con una gente estupenda.
Ay... si me tocara una primitiva de las buenas, no iba a quedar ningún perro abandonado vagando por ahí y pasando hambre...
Tras esta triste historia con final feliz, unas fotos de la gran nevada que ha caído hoy aquí.
Mis gatos se lo han pasado bomba en la nieve y nosotros también, yo con mi cámara disfrutando lo mío y esquivando algún bolazo...
Por cierto, no hay nada más bonito que un almendro rosa en flor recién nevado...
hola Silvia,
ResponderEliminarque bellísima historia de la perrita, sobre todo porque tiene un final feliz, y todo gracias tu bondad y amor por los animales y la vida; y que preciosas fotos de la nieve y las flores... tus gatos son adorables, el blanco con negro del tuxedo se parece tanto a mi Frau Kitty... yo tengo sentimientos encontrados sobre mis gatos estos días, cuando vivíamos en otro vecindario eran libres y andaban por las calles, ahora, los tengo viviendo a los pobrecillos en mi departamento, con acceso solo a pequeño patio, por que hay muchos autos afuera, perros bravos, y gatos callejeros que los pelean, como se divertirían en la nieve como tus gatitos, en fin, la vida es diferente en la ciudad...
muchas gracias por compartir esta maravillosa historia y las fotografías, siempre leo tu blog, y siempre termino con una amplia sonrisa!
saludos y abrazos virtuales desde San Diego, California
Te felicito, ojalá todo el mundo reaccionara igual ante estas situaciones!!
ResponderEliminarMira, como me toque a mí te prometo justo lo mismo. Te lo haré saber jajajajja :)
Preciosas las fotos.
Bss
Es genial que te decidieras a ayudar a esa perrita. Habría menos sufrimiento en el mundo si todos nos implicáramos un poco. Me han encantado las fotos de tus gatos, y me ha dado una envidia terrible también :) me encantaría vivir en el campo. ¡Disfrútalo!
ResponderEliminarOhhh que bonita historia... Besos
ResponderEliminarmi Baño en Ruinas
Muy grande Silvia! Gran corazón, gran final, y gran nevada! Qué guapos tus gatos en la nieve!
ResponderEliminarHOLA SILVIA, ESTO DEMUESTRA DE LO GRAN PERSONA QUE SOS. HAY UN DICHO QUE DICE " HAS EL BIEN, QUE TE DEVOLVERAN EL BIEN", AMIGA TE FELICITO POR TU ACTITUD, PORQUE GRACIAS A TU INTERVENCIÓN TODO TUVO UN FINAL DE CUENTOS, O SEA UN FINAL FELIZ.
ResponderEliminarDESDE SALTA, ARGENTINA UN ABRAZO GRACIELA
Hola Silvia,
ResponderEliminarLlevo dos días curioseando tu magnífico blog y de repente me encuentro con esta historia. Si es que todo va unido, el buen gusto y el buen corazón. Mi marido y yo también somos animaleros y animalistas. Bravo por ser así!!!!!!!