Me lo pido! Eso es lo primero que he pensado al encontrar este rincón perfecto con DIY incluído.
No podría gustarme más... es cálido, acogedor y desprende aires invernales por los cuatro costados. Dan ganas de acurrucarse en esa tumbona/chaise longue forrada de lana y disfrutar de la lectura de uno de los libros de la estantería sobre nuestra cabeza.
Que por cierto, me ha parecido perfecta ya que se adapta al espacio sin ocupar suelo ni tapar totalmente la pared, está hecha a medida, con gruesos tablones de madera blanqueada adosados a la pared de madera también blanca integrándose perfectamente sin estorbar visualmente. Podéis ver cómo hacerla pinchando aquí.
Un par de cajas colgantes como revistero y una mesita auxiliar muy ligera terminan de completar un espacio en el que hay todo lo necesario para disfrutar de un rato de relax.
Espero que os guste tanto como a mí...
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