Hoy no sé si titularlo lunes de inspiración o lunes de digestión...
Ha sido un fin de semana intenso y muy familiar. En casa de mis cuñados, que viven por aquí, nos hemos dado la gran comilona. Parte de la familia es gallega y un par de veces al año vienen aquí cargados hasta los topes con empanada, miel, castañas, vino, pan de centeno, queso de tetilla y por supuesto todo lo necesario para preparar en casa las que ya hemos bautizado como nuestras III Jornadas Gastronómicas del Cocido Gallego.
Ni os lo podéis imaginar, es el plato más abundante que he comido en mi vida, nos ponemos como el kiko, no paran de salir de la cocina fuentes y más fuentes con todo tipo de cosas. Tras unos buenos entrantes a base de empanada y queso, va la sopita de rigor y después un buen plato con garbanzos, cachelos, berza, grelos, androlla, panceta, dos clases de chorizo, cachucha, lacón, un buen pan de hogaza y para terminar, un buen licor café casero. Ahí es nada y como véis, todo light...
No hace falta que os jure que tengo el botón del pantalón a puntito de reventar...
Eso sí, está de muerte y una vez al año (o dos) no hace daño y además, nos juntamos un montón y lo pasamos estupendamente.
Y el domingo, pasamos el dia enseñando donde vivimos a otra rama de la familia, así que ya véis, sin parar, pero bien. Pero hoy lunes, otra vez a la obra, a tomar decisiones y a seguir avanzando.
Espero que hayáis tenido un fin de semana estupendo y que tengáis un buen lunes de inspiración.
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